Con la nueva tecnología LED la luz parece emanar de la piedra, gracias a la ubicación de las luminarias disimuladas con el edificio. Nunca deslumbrante, a veces podero- sa y siempre cálida, esta luz crea un ambiente de reverencia mientras sigue acentuando la arquitectura. La iluminación revela los detalles de obras de arte de renombre como la Virgen y el Niño. Esta estatua, que se trasladó a Notre-Dame en 1818, es la más famosa de las treinta y siete representaciones de la Virgen que la catedral contiene. La iluminación actual redefine el perfil de los personajes, al mismo tiempo que baña con una luz suave la escultura y las flores blancas ubicadas a sus pies. Los rosetones norte y sur, que datan del siglo XIII y simbolizan las flores de paraíso, también se han puesto de relieve. Situados encima de las puertas norte y sur, a más de 50 metros de los rosetones, dos proyectores de 250W completamente invisibles dirigen su haz hacia cada rosetón, revelando la deli- cadeza del esqueleto. Esta iluminación da la impresión de que la vidriera está irradiando luz por sí misma, sin alterar el aspecto exterior del monumento, ya que la luz sólo es visible en el interior. Iluminación adaptada “La Catedral cumple dos funciones básicas, una religiosa y otra cultural, con ceremonias religiosas, visitas (cerca de 14 millones de visitantes en 2013) y conciertos. La nueva iluminación ha sido expresamente diseñada para permitir crear diferen- tes atmósferas en función de estas actividades”, explica Armand Zadi- kian, Diseñador de Iluminación del proyecto. Armand Zadikian ha sido capaz de mantener las zonas de penumbra, jugar con los contrastes y crear efectos de tonos blancos. Con el fin de integrar la iluminación en el edificio y hacer que las luminarias sean prácticamente invisibles para los visitantes ha trabajado en estre- cha colaboración con “Architectes des Bâtiments de France”, el Colegio Oficial de Arquitectos Franceses. “Armand Zadikian ha sido capaz de mantener las zonas de penumbra, jugar con los contrastes y crear efectos de tonos blancos. Con el fin de integrar la iluminación en el edificio y hacer que las luminarias sean prácticamente invisibles para los visitantes ha trabajado en estrecha colaboración con “Architectes des Bâtiments de France”, el Colegio Oficial de Arquitectos Franceses”. REPORTAJE|31