EMPRESA DESTACADA Empresas capaces de desplegar servicios de escala global en cuestión de meses, y actualizarlos y adaptarlos a los gustos y pre- ferencias de sus usuarios en cuestión de días, o hacer pruebas de nuevos conceptos con unos cuantos millones de cuentas en cues- tión de horas. Empresas capaces de recabar, almacenar, procesar y analizar canti- dades ingentes de datos y responder con nuevas propuestas que las hacen cada vez más atractivas. Después de mucho análisis del fenómeno, alguien dio en llamar a esto Transformación Digital. Y el sector nanciero ha tomado buena nota. La susodicha Transformación Digital impacta en la línea base de las entidades nancieras, forzando una reingeniería del modelo, desde las altas esferas de negocio hasta las tuberías de los sistemas de infor- mación, procesos y profesionales que los sustentan. Y como aplicados estudiantes de la realidad socioeconómica, han sabido entender que esta Transformación no es un destino, ni un n, sino una forma de entender cómo deben conducirse en estos tiempos. El sino de los tiempos Si algo caracteriza el fenómeno de la Transformación Digital en el sector nanciero es el desacople de la cadena de valor. Un fenómeno que se ha visto ampli cado por la liberalización, la desregularización/ regularización del sector (por ejemplo, la directiva PSD2 vs la direc- tiva GDPR), y la exibilidad que aportan las nuevas tecnologías. Así, estamos siendo testigos de cómo la oferta de servicios nancie- ros ya no es necesariamente un oligopolio de unas cuantas entidades, sino que puede ser estructurada por una multitud de actores (las Finecth) que orquestan sus servicios para proporcionar un eco- sistema de servicios mucho más rico y adaptado a los diferentes segmentos de mercado. A las entidades nancieras no les ha quedado otra que adaptarse a esta realidad, transformándose paulatinamente o drásticamente en facilitadores de acceso a los mercados nancieros, adaptando y abriendo sus plataformas tecnológicas (APIs) a estos nuevos acto- res, construyendo ecosistemas de servicio que permitan explotar los efectos de red. El retail de los servicios nancieros. Y si esta a rmación resulta chocante, pensemos un momento qué supondría que Google, Amazon o Apple decidieran entrar (de lleno) en el sector nanciero. O mejor, ¿por qué no lo hacen? La tecnología como motor Parecería que hablar de tecnología en el sector nanciero es redun- dante. Pocos sectores han explotado de forma más e ciente las ventajas que la innovación tecnológica ha puesto a su disposición. Sin embargo, de unos años a esta parte, la irrupción, o mejor expresado, la disrupción causada por las tecnologías ha acelerado enormemente la necesidad de adaptarse. Pensemos que en menos de 20 años, hemos pasado de los primeros ensayos de banca electrónica a una capilaridad total gracias a las redes móviles y los smartphones. De un conjunto reducido de ope- raciones electrónicas a la gestión de todos nuestros activos desde la palma de la mano. Nuevos medios de pago alternativos, las criptomonedas y blockchain, el Big Data, el machine learning y la inteligencia arti cial, la virtualiza- ción y la nube... el ritmo de adaptación es frenético. Y en medio de toda esta vorágine, la necesidad de continuar siendo un pilar sólido de la economía, haciendo frente a nuevas amenazas que ponen en riesgo el sistema (cibercrimen) y a los consumidores (priva- cidad, protección de datos). A modo de cierre Ciertamente, el sector nanciero vive tiempos interesantes. Y de esta nueva realidad que es el constante cambio, cabe esperar una profunda transformación de las entidades, adaptando de forma constante sus procesos de negocio, sus plataformas tecnológicas, sus equipos y talento. Con el cliente en el centro del modelo. • 27