cómo hacer que los empleados sientan el ‘engaged’, se sientan vinculados con la empresa y produzcan esta innovación que nos va ayudar a tener más éxito”. Para Google, la contratación de personas es un proceso crítico del negocio. Isaac Hernández compartió algunas de las peculiares fórmulas de contratación de su empresa para conseguir este com- promiso: nadie de la organización tiene capacidad de contratar a otra uniteralmente, ni siquiera el presidente de la compañía. El proceso de selección está controlado por una comisión de 4 personas con derecho a veto y con nacionalidad distinta al candidato para evitar amiguismos. “Se contrata para la com- pañía, no para un puesto, porque al vivir tiempos cambiantes se necesitan personas que puedan fluir con la compañía y con capacidad de adaptación. Se valoran las personas con las que es fácil trabajar. Nos gusta el talento individual pero sobre todo nos gusta el talento colectivo. No nos gustan las personas que pueden ser súper expertos pero que nadie quiere trabajar con ellos porque son odiosos”. El equipo es la base de esta innovación y sus ideas pueden trans- formar la empresa pero desde abajo hacia arriba. “En un entorno volátil e incierto como el de ahora nadie tiene las respuestas. Ningún gurú. La mayor parte de los gurús del mundo se han equivocado tratando de anticiparse a las cosas que no se ven. Es importante buscar la solución a los problemas sumando los esfuerzos de las personas de nuestra compañía. No nos crea- mos que por ser los presidentes o los CEO de nuestra empresa tenemos las respuestas a todas las oportunidades. Además de los modelos jerárquicos, tengamos en cuenta modelos tipo red social. Debemos obsesionarnos en que muchas de las ideas para mejorar están dentro de nuestras empresas. Cread un entorno de transparencia y seguridad para que las ideas no sólo surjan sino que también se comuniquen. Cread oportunidades para hablar con los empleados y para conectar con ellos”, aconsejó Hernández. Para concluir su intervención, Isaac Hernández volvió a reiterar la importancia del momento que se está viviendo, en plena tormenta perfecta: “Estamos en un momento precioso pero que nos tiene que producir cierta incomodidad porque si no estamos un poco incómodos no tendremos las ganas para dar el salto y tratar de experimentar y hacer las cosas de una forma distinta. Nunca ha habido tanta oportunidad de hacer cosas distintas. Y lo que vamos a vivir en los próximos años lo hace todavía más apasionante que los últimos diez años”.• Tendencias 51