30 ENTREVISTA El reto de las pymes Según sostiene Fernández Pariente, las pymes no pueden dedicar los mismos recursos a la preven- ción (y al medio ambiente y a la calidad) que las grandes empresas, mientras que la normativa que deben cumplir es la misma. En España la gestión de la prevención la puede asumir la empresa o bien puede contratar un Servicio de Prevención Ajeno (SPA). “Son las únicas opciones tanto para grandes empresa como para pymes”, explica. En cambio, en Europa la opción más habitual de las pymes es la contratación de personal autónomo para la reali- zación de determinadas preventivas. De hecho, según apunta, la normativa marco de prevención (Directiva 89/391/CEE) prevé en su artículo 7.3 que sí se puedan contratar autónomos: ‘...Si las competencias de la empresa son insufi- cientes para organizar dichas actividades de protec- ción y de prevención, el empresario deberá recurrir a competencias (personas o servicios) ajenas a la empresa’. Pero en la transposición a la Ley 31/1995 de PRL, las personas desaparecieron del texto, y la línea que marca nuestra Ley es que las pymes con- traten un SPA. Puede servir de ayuda la Ley de apoyo a los em- prendedores y su internacionalización, que previsi- blemente el Senado aprobará el 11 de septiembre. Esta Ley aumentará de 10 a 25 el número de traba- jadores que puede tener una empresa para que el empresario asuma personalmente la gestión la pre- vención, y que el INSHT ‘... en colaboración con las Comunidades Autónomas, prestará un asesora- miento técnico específico en materia de seguridad y salud en el trabajo a las empresas de hasta vein- ticinco trabajadores’. “Aunque nos parece que es demasiado trabajo para los empresarios, que deberían dedicar todo su es- fuerzo a hacer funcionar sus empresas”, apunta el delegado territorial de Aepsal en Madrid. En el ámbito industrial, ¿la seguridad y la prevención es aún una asignatura pen- diente? En grandes empresas cada vez menos. Gracias a las di- ferentes iniciativas surgidas desde la Administración y a la inercia creada en las grandes empresas, la cultura preventiva se va extendiendo más a lo largo de todo el tejido empresarial. ¿Y en cuanto a las pymes? En términos generales, la pequeña y mediana empresa tiene un recorrido pendiente en la gestión de la prevención. ¿Cómo se puede acortar ese recorrido? Cambiar la idea de que es un gasto. ¿Y no es un gasto? No, es una inversión y una mejora competitiva que dife- rencia a la empresa que integra la prevención en sus procesos de la que no lo hace, tanto a nivel de resulta- dos como a nivel de la percepción que tienen de ella sus clientes. ¿Cómo describiría la cultura preventiva en España? ¿Están las empresas españolas a la altura de otras europeas? El principal problema es que la normativa que se ha des- arrollado en estos 20 años de aplicación de la LPRL ha hecho que las empresas perciban que la prevención como una obligación exterior que obliga al cumplimiento de una normativa extensa y complicada, y no como lo que realmente es: una inversión que puede ayudar al desarrollo empresarial. Lo que comentaba antes... Sí, y volviendo a lo ya dicho, si tanto las empresas como, sobre todo, los técnicos de prevención pudiesen partici- par en el desarrollo normativo, se conseguiría una preven- ción más real que la convertiría en una obligación interior basada en la consecución de mejoras productivas, orga- nizativas y de calidad para las empresas que la aplicasen. Por todo ello, debemos reconocer que, en general, en las empresas españolas existe una menor implantación de panorama