ROBOTS ahorran el espacio en almacenamientos intermedios pues las pie- zas se transportan directamente desde su punto de producción hasta su punto de consumo y además optimizan las rutas de logís- tica interna. Disponen de un sistema tipo escáner que les permite detectar obstáculos y así disminuir la velocidad o parar cuando es necesario, optimizando la distribución de materiales entre áreas productivas o almacenes. Para la consultora de la Unidad de negocio Process Safety de TÜV SÜD, Ana Díaz Ramos, “aunque estas tecnologías han sido incor- poradas a los procesos productivos del sector automotriz, queda mucho por hacer desde el punto de vista del marco normativo”. Solo una norma, la ISO-TS 15066, regula los COBOT’s, complementando dos normas tipo C sobre robots industriales ya existentes (UNE 10218-1 y 10218-2). “No se prevé que hasta el 2020 salgan a la luz otras normas UNE específicas”, añade. El caso de los AGV’s, única- mente existe la UNE 1525 sobre carretillas, por lo que “queda un mayor desarrollo normativo”. En su opinión, “la revolución industrial 4.0 supone un gran reto para los consultores en seguridad de máquinas, ya que queda un largo camino hasta una perfecta sinergia entre máquinas automatizadas y personas en materia de seguridad”. Mientras tanto, la Industria 4.0 sigue avanzando, estrechando lazos entre la fábrica real y la virtual, hasta evolucionar a una Industria 5.0 en la que los cobots trabajarán sincronizados con los humanos y no exista ningún entorno ni pro- ceso donde la automatización sea impensable. • 27