8 AQ8 Comunicación para la salud Editorial La actualidad manda y no tengo más remedio que cambiar sobre la marcha esta crónica. Lo lógico habría sido hablar de cómo ha discurrido la feria Cevisama o la modificación del Có- digo Técnico pero ahora toca incidir en que la arquitectura y la edificación estén al servicio de la salud, el principal tema de preocupación inherente al ser humano. A día de la fecha España y el mundo entero estamos inmersos en un problema que nos lo habríamos tomado a risa hace un solo mes y que va a cambiar nuestras vidas. Estamos en una guerra mundial sin bombas. Las cifras del coronavirus ascienden en la mañana de 20 de marzo a 850 víctimas mortales y más de 18.000 contagiados en España...estas cifras estarán obsoletas al día siguiente. Estamos en el momento más grave (lo peor está por llegar) y la realidad está empezando a superar la ficción haciendo de esta epidemia una crisis sin parangón y de magnitud histórica (ya no histérica) mundial por sus efectos socia- les, laborales, médicos y como no, económicos. Estamos inmersos en la incertidumbre, la sensación de inseguridad y el miedo, pero seguro que generará un cambio del paradigma. No seré yo quien analice la gestión de todo esto, tiempo habrá; también veremos las con- secuencias para los diferentes sectores. Ahora toca apretar los dientes para hacer frente a los tiempos duros que estamos viviendo y hacer lo nuestro, que es comunicar, en este caso alrededor del mundo de la edificación. Ahora más que nunca que estamos confinados en nuestras casas (no somos conscientes pero antes de esta situación de emergencia sanitaria, en situaciones normales, ya pasába- mos cerca del 90% de nuestra vida en el interior de los edificios), debemos darnos cuenta de lo importante que es que nuestros edificios, nuestras viviendas y lugares de trabajo garanticen un ambiente adecuado, con unos niveles óptimos de calidad del aire interior en cuanto a temperatura, humedad y concentraciones de CO2 y otros contaminantes y pató- genos. Para ello, para favorecer el confort, se precisa un correcto diseño, un aislamiento y hermeticidad mínimas o evitar los compuestos orgánicos volátiles. En esta situación de emergencia que vivimos también son fundamentales aspectos como el control de las obras, el uso adecuado del ascensor o un ambiente que permita el co- rrecto teletrabajo. El mundo digital está jugando un papel esencial. Pero si nos centramos en los hospitales, las ́áreas de ambiente controlado ́ requieren que estos entornos estén adecuadamente validados y que funcionen correctamente (p.e. número de renovaciones hora, presión negativa adecuada, test de estanqueidad de los filtros HEPA, extracción del aire directa...). Aprovecho para mostrar todo el apoyo y especial agradecimiento a los que están en primera línea de batalla, a todo el personal sanitario. Debemos hacer de esta crisis sin precedentes una oportunidad: concienciar de aspectos hasta ahora minusvalorados pero que todos entendemos: salubridad y confort, para lo que será imprescindible establecer un diálogo entre los sectores sociosanitario y edificación; un ejemplo de ello lo hemos tenido en el Congreso Life Habitat. Cuídense mucho y tengan por seguro que saldremos de ésta. Animo a todos!!. Santos de Paz, director de iARQCO