TENDENCIAS 44 El 49% de los consumers de Reino Unido afirma que si dispusieran de información clara en el packaging de cómo gestionar el residuo se sentirían más motivados a hacerlo. Por ello, la industria alimentaria, a través del packaging, ha de inno- var ofreciendo envases más sostenibles. De esta forma, no sólo protegerán el medio ambiente, sino que se ganarán la confianza de los consumidores concienciados. Según este mismo estudio, “el 58% de los consumidores chinos de las áreas metropolitanas están dispuestos a pagar más por los productos de aquellas empresas socialmente responsables.” Un ejemplo de ello es un material a partir de PHBV, que permite tanto la fabricación de envases tipo tarrina, como botella, sin descartar otros formatos. Un envase biodegradable en el mar y compostable realizado a partir de la colaboración de un equipo mul- tidisciplinar de investigadores de Ainia con el equipo de innovación de The CircularLab. Tendencias en procesos productivos: la cuarta revolución industrial Según el estudio ‘50 estrategias para 2050. El trabajo y la revolución digital en España’ de la Fundación Telefónica, cada vez más se hace necesario por parte de los sectores industriales fomentar el uso de tecnologías y la experimentación en realidades alternativas, como la realidad virtual y la realidad aumentada, con información accesible en red. Estos nuevos paradigmas tecnológicos crearán numerosas oportunidades en la industria (procesos de producción inteligentes) y para el estudio del comportamiento del consumidor. En la misma línea apunta Christian Pedersen, en un artículo publi- cado en la revista EuroFach Electrónica de Interempresas, “la Inteligencia Artificial (IA) se combinará con sensores de nueva gene- ración para crear un nuevo tipo de automatización de negocios. Y el Blockchain se librará definitivamente de sus connotaciones negati- vas y emergerá como habilitador y no como disruptor”. Dada su importancia, Ainia tiene abierta una línea de I+D propia para avanzar en la Industria 4.0, tanto en sensórica avanzada como en Inteligencia Artificial, Blockchain y otras TIC disruptivas, como la interoperabilidad de sistemas, el big data o el Internet de las Cosas (IoT). Sobre esto último, el Internet de las cosas ya es una realidad. Según el citado trabajo de Fundación Telefónica: “Hay otros escenarios en expansión que podrían conducir a una verdadera revolución, siendo la nueva frontera el Internet of beings (IoB). Sitúa al ser humano como centro de toda tecnología basada en la inteligencia colectiva, y presenta numerosas aplicaciones en distintos campos, entre ellos, la industria alimentaria”. Por ello, se hace necesario desarrollar estrategias que impulsen la transición del Internet de las Cosas al Internet del Ser Humano. La tendencia apunta a una mayor demanda por parte de la industria alimentaria de maquinaria automatizada e inteligente, especial- mente en sector como el cárnico, las frutas y verduras, productos de panadería y en la industria de las bebidas. Apuesta por las energías renovables, la gestión del agua y la minimización de residuos Como también apunta la revista Forbes, la sostenibilidad y la Economía Circular pueden ser muy disruptivos, sobre todo aquellos relacionados con la gestión del agua y el cambio climático. Por ello, se hace necesario desarrollar e implementar adecuadamente en la industria alimentaria estrategias que promuevan la producción y consumo de energías renovables y tecnologías verdes (eficientes, de bajas emisiones de CO2, de tratamiento de residuos) a través del impulso de sus líneas estratégicas, de apoyos públicos y financiación. Envase biodegradable en el mar y compostable realizado a partir de la colaboración de un equipo multidisciplinar de investigadores de Ainia con el equipo de innovación de The CircularLab.