18 ENTREVISTA El proyecto foodLinker cuenta con el aval científico-médico del Hospital Sant Joan de Déu. bajo y se ha contado con la colaboración absolutamente necesaria de una institución como el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, porque definir claramente los alér- genos no era nada trivial. Se hizo todo un estudio para en- tender la industria productora y congeniar sus procesos con las opiniones médicas. El gran reto de foodLinker ha sido precisamente congeniar tres mundos tan diferentes como la ingeniería informática, la medicina y el mundo de la industria. La primera vez que nos sentamos con las em- presas y les enseñamos el proyecto realizado junto a los médicos éstos no entendían nada, evidentemente porque el lenguaje que utilizan unos y otros no es el mismo. ¿Y cómo han unido a estos dos actores imprescindi- bles para llevar a cabo el proyecto? Para acabar dando este servicio hemos tenido que des- arrollar una metodología para que los fabricantes puedan introducir correctamente los datos. Nada más comenzar nos fijamos que responder unos simples cuestionarios sobre los componentes de los alimentos no resultaba fácil, ya que el propio fabricante habría de verificar ante- riormente la procedencia de toda la materia prima antes de poder contestar con exactitud la pregunta. No se trata de simplemente confirmar si un producto lleva leche o no, sino saber si ese producto lleva caseinato de amonio, caseína, colorante E-270 o E-325, etc. Por ello desarrolla- mos una plataforma tecnológica con la estrategia de doble validación —como en la industria médica—, forzan- do de esta manera a una persona de la empresa produc- tora a que defina los productos y otra que sólo los valide. Pero aún así, los médicos del Hospital Sant Joan de Déu, pedían un tercer control y este lo hemos encontrado ahora creando una estándar de certificación solo de ges- tión de alérgenos, que complemente la propia plataforma y que asegura, a través de inspecciones de dos agencias de prestigio internacional como Applus+ y Bureau Veritas, que un centro de producción esté certificado conforme al estándar de gestión de alérgenos de foodLinker. Es a partir de ese momento cuando dejamos introducir al fa- bricante los datos en la plataforma. ¿En qué ha consistido exactamente la colaboración con el Hospital Sant Joan de Déu? Nuestra suerte ha sido poder contar con el Hospital Sant Joan de Déu desde el primer minuto. Nosotros íbamos con la idea de copiar las etiquetas de los productos y ofre- cer la información al consumidor, pero cuando le plante- amos eso a los profesionales médicos nos advirtieron en seguida que entender el sistema inmunológico de la gente y dar una un servicio con información de calidad era otra cosa totalmente diferente. Un alérgico puede no tener una reacción en un momento determinado del día y, en cambio, afectado por el estrés o por otra situación tener una reacción en otro momento ingiriendo el mismo panorama