58 ENVASE meabilidad a los diferentes gases y una resistencia me- cánica alta para evitar una posible punción. Dos lami- nados multicapa comunes, que actúan como barrera son PA/PVdC/PE (5) y PA/EVOH/PP. La capa de PA per- mite la impresión. La capa central actúa como barrera. Y la interior debe permitir la termosoldadura. Las bar- quetas de comida precocinada y sobres para productos deshidratados, son ejemplos de envases que utilizan este material multicapa. La segunda opción para reducir la cantidad de O2 en el espacio cabeza de los envases son los secuestrado- res de O2. Estos secuestradores de O2 pueden depo- sitarse en el material del envase o en el del cierre. Ejemplos de secuestradores son metales y óxidos me- tálicos, ácido ascórbico o enzimas. Estos compuestos tienden a oxidarse con mayor facilidad que el alimento contenido, y por tanto utilizan el O2 existente, evitando que quede disponible. El principal problema es que la mayoría de los secues- tradores de O2 no pueden entrar en contacto directo con el alimento. Por lo tanto, es función del diseño del envase separar físicamente este elemento del produc- to, pero al mismo tiempo, permitir la interacción del se- cuestrador con el O2 existente en el espacio cabeza. Los envases activos con agentes antioxidantes pueden ejercer una acción de protección sobre alimen- to contenido, reduciendo las especies reactivas del O2. Ejemplos de antioxidantes aplicados al material de en- vase son la vitamina E, que ayudan a reducir los efec- tos de la oxidación. B.2. Envases activos para el control del CO2 Muchos de los alimentos que se comercializan enva- sados generan CO2. Las frutas y hortalizas, por su na- turaleza, consumen O2 y generan dióxido de carbono. Los productos tostados, como el café, una vez enva- sados siguen desprendiendo CO2. Para controlar esta emisión se utilizan sustancias como el hidróxido de calcio. Por otra parte, existe otra gama de productos que por su elevada humedad una vez envasados, requieren el uso de CO2 como fungicidas. Productos horneados, carne fresca o quesos, son algunos de los productos que requieren de emisores de CO2 para controlar el Envases activos antimicrobianos. crecimiento microbiano. Ejemplos de compuestos emisores de CO2 son el bicarbonato cálcico y el ácido ascórbico. C. Presentar e identificar el producto Esta función engloba la función de informar y la función de vender el producto. La primera, ofrecer información al consumidor, requiere de una ampliación para informar a cualquier miembro de la cadena de distribución sobre el estado del producto. El modo de ofrecer esta información se basa en nuevas tecnologías, como las etiquetas RFID o los indicadores; elementos incluidos dentro de la defi- nición de envases inteligentes. C.1. Envases inteligentes Un envase inteligente es aquel que no solamente pro- tege el contenido, sino que interacciona con él: obte- niendo información del producto o de su entorno. Esta información se procesa y se presenta al consumidor. Muchos de los envases inteligentes para productos de alimentación están basados en sustancias indicado- ras, es decir, sustancias que informan del estado en el que se encuentra un producto. Un buen ejemplo son los indicadores de frescura, que revelan la calidad del producto envasado a través de su respuesta frente a alguno de los cambios que se suceden en el alimento. Este pequeño sensor reacciona con los gases genera- dos por el producto durante la reacción de oxidación, y cambia su estado inicial (generalmente cambia de color) para informar del cambio en el producto. Indica- dores termocrómicos o de humedad son otras de las posibilidades que ofrecen los envases inteligentes. La segunda, presentar y vender el producto, se con- vierte en adaptar los productos al gusto del consumi- dor. Un consumidor que cada vez más exige nuevas funciones que consigan un producto listo para consu- mir. Quizás, esta es una de las funciones más comple- jas dentro de la definición de envase, y seguramente tecnología