45 ENVASE El EPS (poliestireno expandido) es el material de en- vasado líder mundial para pescado y otros produc- tos marinos en cualquier estación del año. El motivo es muy simple: no existe ningún otro que le iguale en prestaciones: alta capacidad aislante, resistencia a la hu- medad y capacidad de absorción de impactos entre otras. Además, el hecho de ser un envase monomaterial cons- tituido en un 98% por aire, asegura una optimización má- xima del uso de recursos naturales en su proceso de fabricación y reciclado. Únicamente un envase que ofrezca una baja conductivi- dad térmica permite satisfacer unas exigencias estrictas, tanto las derivadas de la normativa como las del punto de vista de la calidad y seguridad, a los que se someten los profesionales del sector alimentario en lo referente al control de temperatura de los productos que fabrican. El poder aislante del poliestireno expandido es muy elevado en relación con otros materiales de envasado convencio- nales, propiedad esencial para asegurar que no se rompa la cadena de frío del pescado o el marisco. En la estabilidad térmica de los alimentos frescos pueden influir distintos factores como las operaciones de carga y descarga, el transporte a las áreas de almacenaje, al lugar de distribución y por último del centro logístico al punto de venta. Otros parámetros de incertidumbre que entran en juego son además la fiabilidad de los equipos de refri- geración en los almacenes, en los vehículos de transporte y en las cámaras del punto de venta. Por ello, la elección correcta del material del envase es crucial para asegurar la correcta conservación del pescado. Este tipo de producto fresco inherentemente cuenta con un elevado porcentaje de agua, a lo que se debe sumar el hielo que se utiliza para asegurar su mantenimiento en una temperatura óptima que evite la proliferación bacte- riana. El carácter no higroscópico del EPS, asegura que el pescado no se deteriore ni estropee por la pérdida de humedad. Además, el envasado en cajas de poliestireno expandido permite el contacto directo con el producto sin necesidad de interponer ningún tipo de elemento entre ambos (bolsas de plástico/separadores, etc.), gracias a su carácter higiénico. Un aspecto fundamental de un envase es tener la sufi- ciente capacidad de adaptación a las peculiaridades del producto. En el caso de los pescados y mariscos frescos, hay especies que precisan un agujero en la parte inferior de la caja y, en otros casos, necesitan una forma redon- deada u ovalada. La gran versatilidad del EPS, por su ca- pacidad de moldearse en todo tipo de volúmenes, permite que el envasado se amolde totalmente a las ne- cesidades del producto. panorama