ACEITE industria alimentaria 72 Rafael Sánchez de Puerta, presidente del Consejo Sectorial de Aceite de Oliva de Cooperativas Agro-alimentarias de España Calidad y control en el aceite de oliva Desde la incorporación de España a la actual Unión Europea, los esfuerzos realizados por el sector productor español para mejorar la calidad del Aceite de Oliva han sido espectaculares. De la mano de las ayudas a la producción y del programa de mejora de la calidad de la anterior Organización Común de Mercados (OCM) del Aceite de Oliva, el sector productor supo aprovecharlas invirtiendo para modernizar completamente sus instalaciones. Podemos decir que en España se han renovado completamente nuestras almazaras incorporando los más modernos sistemas de elaboración y de almacenamiento de nuestros aceites. Asimismo, se han dimensionado las líneas de recepción de aceituna de las almazaras, para que prácticamente toda la producción de aceituna recogida se molture el mismo día que se cosecha, y es posible realizar una separación de lotes selectiva según va- riedades, suelo y vuelo, etc... Todo ello buscando la máxima calidad de los aceites elaborados. También el sistema de liquidación de las cooperativas se ha ido adaptado a las necesidades de producción de aceite de calidad, desglosando las li- quidaciones según variedades, la aceituna sea vuelo o suelo, la época de recogida, etc. Estos esfuerzos no han sido en vano y así la calidad del aceite de oliva español está siendo reconocida internacionalmente, lo que ha supuesto que nuestras exportaciones se hayan disparado batiendo record, año tras año, y donde los aceites de oliva españoles son una referencia mundial. Sin embargo, esta realidad de la producción de calidad del aceite de oliva español se ha visto en ocasiones empañada por informaciones en prensa que siembran dudas sobre la calidad de nuestros aceites. Una parte de estas informaciones obedecen a estrategias comerciales de países compe- tidores que, careciendo de mejores argumentos para valorizar su producción, utilizan la táctica de desprestigiar al contrario. Es el caso de los productores de Estados Unidos y Australia que, utilizando como coartada científica, y aparentemente independiente, informes de la Universidad de Davis, no dudan en cuestionar los métodos de análisis reconocidos por el COI y cuestionar la calidad de los aceites, no solo españoles sino europeos en general. O el caso del informe elaborado por Rabobank, encargado por los productores de aceite de oliva de Estados Unidos, en el que se califica al sector español de obsoleto y productor de aceites de mala calidad, algo to- talmente fuera de la realidad y que no deja de sorprender en una Entidad que pretende ser un referente en el sector. En la prensa española aparecen esporádicamente informaciones que cuestionan la calidad de los aceites envasados en nuestro país, incluso con acusaciones de fraude, que la mayor parte de las veces no llega a ser demostrado, pero eso sí, el daño que se hace a la imagen de nuestros aceites es demoledor. En Cooperativas Agro-alimentarias somos firmes partidarios de que se es- tablezcan todos los controles que sean necesarios para garantizar la calidad de los aceites y evitar posibles fraudes. Sin embargo, creemos que la normativa de control de la calidad actual tiene importantes carencias que hay que subsanar, ya que crea una gran inseguridad jurídica a las empresas de envasado por lo que será necesario revisarla en profundidad. Esta petición ha sido trasladada a la Administración española y Europea y ya se están poniendo en marcha iniciativas para mejorarla. Así, en España, el Ministerio de Agricultura ha puesto en marcha un estudio intercolaborativo