B 2019 Vista general nocturna del conjunto de edificios que forman la Filial de SEAT de la Barcelona. Autor F. Català-Roca. Arxiu Històric del Col·legi d’Arquitectes de Catalunya. Referencia B-20175-1764. Filial de SEAT en Barcelona · 1957-1965 Entre 1957 y 1965, SEAT construyó su filial en Barcelona, formada por un conjunto arquitectónico que debía transmitir una imagen de modernidad y precisión tecnológica, a modo de gran escaparate que se situaría en la principal entrada de la ciudad. Para ello, contaron con los arquitectos César Ortiz-Echagüe y Rafael Echaide, el primero de los cuales, y solo un año antes, había finalizado la construcción de los comedores para los trabajadores de la fábrica de SEAT en la Zona Franca de Barcelona, juntamente con Manuel Barbero, Rafael de la Joya y los ingenieros de C.A.S.A. El edificio se proyectó siguiendo los criterios racionalistas de la arquitec- tura moderna americana del momento, y todo ello, a pesar de la situación de au- tarquía económica y cultural española y las capacidades constructivas de la España de posguerra.1 El resultado se valoró muy positivamente por SEAT y su presidente José Or- tiz-Echagüe, ya que, en ese momento, la marca tenía la intención de proyectar una imagen tecnológicamente avanzada a través de la arquitectura moderna de sus edificios. Por ello, un año después, encargaron al propio César Ortiz-Echagüe y su socio Rafael Echaide el diseño de la nueva filial de la marca en Barcelona.2 Así, los arquitectos siguieron con el planteamiento de un proyecto ambicioso a nivel técnico y formal. La situación estratégica del solar en la entrada de Barcelona (cruce entre la actual Gran Vía y el paseo de la Zona Franca) permitió plantear el edificio como un gran escaparate resuelto a partir de un conjunto de cuatro edifi- cios que se proyectaron y construyeron en dos fases: la primera (1957-1959) inclu- yó los talleres (edificio A) y el gran almacén de coches (edificio B), mientras que la segunda (1959-1964) incluyó la torre de administración (edificio C) y el espacio de exposición y venta (edificio D). A mediados de 1957, los arquitectos recibieron el primer premio Reynolds organi- zado por el American Institute of Architects para la promoción del uso del aluminio en las estructuras por el edificio de los comedores. Para recogerlo, viajaron a Esta- dos Unidos, donde los recibió Mies van der Rohe, que era el presidente del jurado, y pudieron visitar algunas de sus obras durante dos semanas. También conocieron a Frank Lloyd Wright, Richard Neutra, Eero Saarinen y Josep Lluís Sert. BLANCO Y NEGRO