PROFESIONALES En el sinfín perdió la pierna izquierda, pero en ese mismo instante comenzó a ganarse la admiración y el respeto de quienes conocen su caso y observan la manera de afrontarlo. “No es que quiera volver a ser el mismo, es que soy el mismo”, cuenta con rmeza y frialdad. “Tengo claro que físicamente no estoy al 100%, pero me voy adap- tando y poco a poco voy retomando la actividad normal”. Porque Edu, a pesar de que tiene estudios de Mecánica, continuará siendo agricultor. “Quería serlo desde que tengo dientes. Lo llevo en la sangre. Vivo en el campo, adoro el medio rural y aquí voy a seguir. No lo cambio por nada”. De momento, acaba de comprar un camión automático y es capaz de seguir manejando la ota de cuatro tracto- res, de 90 a 330 CV, que tiene en el negocio familiar junto a su padre, Rodolfo, y su tío Amador. También seguirá trabajando con los diferentes implementos que atesoran y con la cosechadora con la que sufrió el percance. “Mi padre, que me vio en ese duro trance, la quiso quemar ese mismo día, pero me negué a ello. Le dije que había que seguir trabajando con ella y lo vamos a seguir haciendo”, recuerda. El joven segoviano realizó estas declaraciones a Interempresas Media semanas antes de comenzar la campaña de recolección de trigo y cebada, que junto al girasol y la remolacha son los cultivos en los que tienen focalizada su actividad. Entre tierras propias, alquiladas y trabajos a terceros asumen unas 500 hectáreas, la mayoría de secano, aunque también tienen una pequeña parte en regadío. Mientras Edu prosigue su proceso de adaptación, a la espera de afrontar con garantías su actividad, se mantiene atento a la evo- lución de la campaña de recolección del cereal. “Si llueve algo más durante el mes de mayo se presenta buena, todo lo contrario que la anterior, que registró unas producciones pobres como conse- cuencia de la sequía”. También observa buenas perspectivas con el girasol, “ya que habiendo tempero la siembra es buena”. En cualquier caso, tiene muy claro que “en la agricultura hay trabajo siempre” y que su futuro sigue estando ligado a ella. Lamenta los “bajos precios que percibimos los agricultores”, lo que convierte a la PAC (Política Agrícola Común) en una herramienta fundamental para mantener la actividad. “Sin esas ayudas sí que probablemente habría que plantearse dejar las cosas”. Edu desconoce los criterios que se aplicarán en la próxima PAC para establecer las subvenciones. Lo que tiene claro es que la actual “sí que convence”. En cambio, se muestra mucho más crítico con las “trabas” que encuentra para solicitar ayudas como joven agricul- tor. “De hecho, ya ni las pido, porque siempre ponen alguna pega”, mani esta. 77