Cada unidad fabricada se somete a un exigente test nal de validación antes de su salida al mercado. EMPRESAS 22 “Llegará un momento que no venderemos máquinas” En una proyección de futuro, Ferrán Iturbe vaticina un cambio sustancial en el mercado. A su juicio, la Agricultura 4.0 y todo lo que trae consigo (conectividad, big data, etc.) supondrá también una revolución en los sistemas de tratamiento y, al mismo tiempo, en la comercialización de la maquinaria especí ca. “Llegará un momento que no venderemos máquinas. Nosotros nos dedicamos a la protección de cultivos y cobraremos por hectárea tratada. Creo que el futuro irá por ahí, aunque para llegar a ello hay que invertir mucho, como ya estamos haciendo, en proyectos de digitalización que suponen la ‘sensorización’ de las máquinas y disponer de una información que actualmente no tenemos. Hoy se fabrican máquinas muy buenas a nivel mecánico, pero falta toda la parte de electrónica”. Uno de los proyectos en los que están trabajando actualmente es la incorporación de un mando que permita obtener información y subirla a la nube, donde estará disponible para el propio fabricante, pero también para el agricultor, que podrá observar y analizar cómo está realizando su labor. En esta línea, han presentado al proyecto europeo Horizonte 2020 la segunda fase de un trabajo, del que ya recibieron una subvención en su primer tramo, que prevé tratamientos individualizados. Es decir, valora aspectos concretos de cada ejemplar para aplicar la dosis adecuada. Digitalización Para estar en condiciones de responder al proceso de digitalización de las máquinas, han apostado por rodearse de empresas especiali- zadas en la materia, algunas de ellas ‘start-ups’, amén de pertenecer al Clúster de Maquinaria Agrícola de Cataluña. Un experto en elec- trónica incorporado a la empresa hace dos años se ocupa de la supervisión y control de este tipo de herramientas. El director general considera clave actuar por delante de la ten- dencia del mercado. En materia digital recuerda el papel que están cobrando el hardware y el software. “Nosotros, como fabricantes de equipos, somos el hardware y toda la parte de producto químico es el software. Y estamos observando que al nal es más importante el software”. Iturbe tiene muy claro que “nos hemos de poner las pilas las empresas de hardware, aunque tenemos el problema que somos un sector muy fragmentado, con muchas pymes”. Ahora observa en ellas una tendencia aperturista, con ánimo cola- borativo. “El sector se ha transformado en los últimos años. Hay mucha gente que se ha dado cuenta de que solos no pueden hacer nada y que hemos de ir unidos”, comenta Iturbe. Internet En España no forma parte de su estrategia realizar negocio a través de Internet. “Nos saltaríamos al distribuidor y eso no lo queremos hacer”, puntualiza el gestor. “Hemos actualizado nuestra web con el n de que sea útil para nuestra red comercial y, de hecho, ahora estamos potenciando la inclusión de herramientas en la Extranet, con un con gurador de producto y una herramienta para disponer de los manuales”. Legislación La homologación europea se ha convertido en un hándicap para los fabricantes, que han encontrado trabas para expandir sus produc- tos y, a la vez, asumir costes añadidos. “Y una homologación no sirve para todas las máquinas, sino tan solo para una tipología concreta. Hay fabricantes pequeños que no podrán soportar la inversión. Es prácticamente como hacer la ISO, te obliga a afrontar unos procesos para los que determinadas empresas o talleres no tienen capacidad”. Ferrán Iturbe confía que este trámite les ayude a vender más máquinas arrastradas en el resto de Europa, ya que deja de ser necesario realizar una homologación en cada país. En mercados de otros continentes no tiene repercusión porque los niveles de exi- gencia son diferentes y Teyme ajusta los modelos según el país y sus características.•