y los cultivos frutales, por lo que los resultados del proyecto están dirigidos a los productores, distribuidores e instaladores de tuberías y goteros, agricultores, productores y al sector de la horticultura de invernaderos. Eficiencia y seguridad validadas Durante el proyecto se han realizado pruebas de validación de las tuberías y los goteros en campo y en invernadero para validar- los y mejorar el producto final. Durante las mismas se tuvieron en cuenta diferentes aspectos en relación con la distribución del agua, la presencia de biofilm en el interior de las tuberías, los defectos en goteros y tuberías, y la calidad del cultivo. Las tuberías y goteros que contenían aditivos antimicrobianos y antirraíz tuvieron resultados prometedores en comparación con los productos tradicionales, ya que garantizaron un índice de flujo constante durante todo el periodo de experimentación. La presencia del aditivo antimicrobiano inhibió el crecimiento de la población de hongos en el interior de las tuberías, con una clara correlación con el aumento de la concentración del aditivo, por lo que finalmente, las nuevas tuberías aseguraron un rendimiento y una calidad de los cultivos comparable a los sistemas convencionales. Además, en el proyecto se ha llevado a cabo un análisis del ciclo de vida para evaluar el impacto medioambiental de la nueva tubería. El resultado es que, puesto que la tubería puede utili- zarse para periodos más largos, se genera una menor cantidad de residuos plásticos y de emisiones de gas. Finalmente, se ha estimado un análisis de los costes para ase- gurar que el nuevo producto será competitivo con los sistemas actuales, con una diferencia de menos del 10%. Beneficios para la industria y la agricultura En general, la subvención europea para el proyecto Riga ha ayudado al consorcio a encontrar nuevas oportunidades de negocio para las empresas que han participado en el proyecto (Irritec y Galloplast), a solventar problemas reales de los agri- cultores y productores en Europa por medio de la información proporcionada por los centros de investigación que participan en el proyecto (Cersaa, PCG, PCS) y a comenzar acciones de carácter innovador sobre tecnologías de irrigación que puedan llevar al desarrollo del equipamiento y sistemas con un menor impacto medioambiental, debido a la reducción del consumo de plástico en el sector de la agricultura, gracias a la experiencia del coordinador del proyecto (Aimplas). Riego 39