más para cumplir con las normas estamos perdidos. Es un reto para el mundo técnico de la sanidad vegetal en Europa que el agricultor pueda comprobar que la asesoría de GIP le permite mejorar la productividad y, por tanto, el beneficio al mismo tiempo que cumple con las normas de la agricul- tura europea y le mantiene los mercados actuales e incluso le abre otros que son muy exigentes en esas materias de salubridad alimentaria. Fíjense la cantidad de técnicos que hoy en día actúan en la agricultura española bajo diversos paraguas y denominaciones: técnicos de producción inte- grada, técnicos de ADV, de Atria, etc. Lo hacen porque se ganan su sueldo, porque el agricultor ve que les resuelven problemas y les ayudan a mantener la rentabilidad de su explotación hasta el punto que en la sanidad vegetal de la agricultura española hay un antes y un después de que esos técnicos empezaran a actuar. Si no fuera así, habrían desaparecido. Seamos por tanto optimistas. Los cultivos y las técnicas Lo que marca la diferencia en el progreso de aplicación de la GIP es, sobre todo, el tipo de cultivo. Sin hacer un reco- rrido sistemático por todos los cultivos, los cultivos hortí- colas, los frutícolas y los cítricos son los que han mejorado más sensiblemente en los últimos años en lo que respecta al control de las plagas en sentido estricto, es decir, el con- trol de insectos y ácaros fitófagos; no me atrevo a opinar sobre el control de enfermedades y malas hierbas. En otros cultivos como el olivo o la alfalfa, por ejemplo, han experimentado avances notables en plagas concretas. Es una visión, la mía, muy parcial y otros colegas pueden tener otra opinión. Hay varios indicadores que, de conocer su evolución en los últimos lustros, nos permitirían respon- der con más precisión y objetividad a la pregunta de los cultivos y comunidades más activas en este campo. Entre ellas, no hay duda que se encuentra Andalucía, lo que no puede sorprendernos dada la importancia de la agricultura en esa Tierra. La presencia de varias universidades y el CSIC en la Comunidad con programas muy relevantes para la GIP, el esfuerzo de la administración en promover el aso- ciacionismo alrededor de la asesoría técnica en sanidad ve- getal, el dinamismo de algunos sectores agrícolas punteros en recabar esa misma asesoría son factores que, entre otros, han ayudado a ofrecer ese progreso tan signi- ficativo en la Comunidad. La evolución de la producción integrada La producción integrada es una tecnología que ha progre- sado muy en relación con el avance científico desde su Visítenos en Pabellón 4 - Calle A-B - Stand 5-12