El mayor productor avícola de Tartaristán recurre al revolucionario sistema de automatización de Sealed Air para satisfacer el enorme aumento en la demanda

Al ver el rápido aumento de la producción en Chelney Broiler LLC y su ambiciosa estrategia de marketing, es fácil de entender que la elección del eslogan ‘Bez buldirabiz’ (¡Sí podemos!), adoptado por Tartaristán para promocionar su exitoso modelo económico, es representativa de la estrategia de crecimiento de la empresa.

Chelny Broiler comenzó a funcionar en 2003 y su actividad abarca el ciclo completo de producción avícola, desde el huevo hasta la cría, sacrificio y procesado. Satisfacer la demanda de productos avícolas en el mayor país del mundo plantea enormes retos logísticos. Cuando la producción alcanzó las 58.000 toneladas se hizo necesaria una nueva planta, y en 2007 se inauguró la fábrica de Neberezhniye Chelny. Desde entonces, las ventas han aumentado exponencialmente y, en 2014, la facturación superó los 8.000 millones de rublos (alrededor de 114 700 millones de euros), con beneficios netos de 1100 millones de rublos (15,7 millones de euros).

La estrategia de desarrollo de Chelny Broiler apunta a nuevos horizontes. A finales de 2015 exportaba desde Tartaristán 4.000 toneladas al mes y, en cinco años, el objetivo es exportar 119.000 toneladas, el 74% de la producción total de la fábrica. La empresa tiene previsto ampliar su red minorista en distintas ciudades de Rusia, incluidos los grandes centros económicos de Moscú y San Petersburgo.

La materialización efectiva de la ampliación de la producción y la expansión geográfica han sido posibles gracias a la colaboración con Sealed Air. En un principio, la producción de Chelny se organizaba mediante operaciones de carga manual en las que se empleaban bolsas de polietileno no retráctiles que garantizaban una vida comercial de cinco días. Sin embargo, en 2009, al aumentar las distancias de los transportes, la empresa eligió soluciones de envasado de Sealed Air y comenzó a utilizar, sobre la base de los equipos ya existentes, bolsas retráctiles al vacío Cryovac BN que alargaban la vida comercial de los productos avícolas frescos de 5 a 10 días.

La demanda no tardó en superar a la producción, y los 12 operarios de la empresa apenas daban abasto a entregar los pedidos, ni siquiera trabajando de forma continuada, ya que la productividad de la carga manual resultaba insuficiente. Adicionalmente, la operación manual dificultaba la implementación de medidas de higiene exigentes durante la producción para excluir la posibilidad de contaminación cruzada. Además, la presentación del producto final no resultaba muy atractiva para el consumidor, a pesar de la importancia que ello tiene para la comercialización.

La dirección de la empresa comenzó a buscar distintas opciones de automatización de procesos que pudieran ayudarles a mejorar la productividad y aumentar la eficiencia del negocio, contribuyendo a cumplir sus planes de desarrollo.

En 2012, la empresa se puso en contacto con Sealed Air con el objetivo de aprovechar sus planteamientos comerciales basados en el conocimiento del consumidor para crear una solución a medida capaz de alcanzar incluso las metas más ambiciosas, y la respuesta fue: “Sí podemos”.

Varios representantes de Chelny asistieron al evento ‘Packforum’, organizado en París por Sealed Air, y la empresa decidió instalar la línea de envasado giratoria VR8630 junto con tres cargadores automáticos de bolsas BL 120.

Esta tecnología sin operarios ofrece lo más avanzado en eficiencia operativa, seguridad alimentaria y creación de marca, con importantes mejoras en el rendimiento de los procesadores de aves y en los beneficios

Para proporcionar a Chelny la mejor solución, los cargadores BL120 fueron ajustados por ingenieros de Sealed Air conforme a los requisitos anatómicos especiales de las aves enteras.

Según Ramil Mukhametshin, director general adjunto e ingeniero jefe de Procesos: “He de recalcar que la línea fue adaptada a medida por Sealed Air de acuerdo con los requisitos técnicos y tecnológicos de nuestra planta. Los cargadores BL120 se adaptaron a las peculiaridades anatómicas de las aves enteras que producimos. Valoramos muy positivamente el elevado nivel de profesionalidad de los especialistas de Sealed Air”.

Tras la instalación de los equipos de Sealed Air, no tardaron en producirse cambios positivos. La combinación de los BL120 y la VR8630 permitieron a Chelny ofrecer un producto sin manipulación humana desde el sacrificio del ave hasta que llega a la mesa del consumidor final. Las condiciones higiénicas logradas gracias a los nuevos equipos permitieron a la empresa mejorar la seguridad de sus productos (algo crucial en el mercado avícola) al reducir el riesgo de posible contaminación cruzada del producto a través de los empleados. Como resultado, la vida comercial del producto aumentó sensiblemente, lo que permitió reducir el desperdicio alimentario, cuestión de gran trascendencia para grandes distribuidores y consumidores finales. Además, con el sistema neumático de rotura de corvejones del BL120, la empresa pudo conseguir una excelente presentación en los envases de aves enteras. Así, los nuevos equipos contribuyeron a resolver los problemas de suministro a cadenas de distribución en regiones externas a Tartaristán, y mejoraron la apariencia del producto final, abriendo nuevos horizontes de negocio.

Lo importante es que los equipos garantizaron la flexibilidad del proceso de producción y redujeron significativamente los costes operativos. En conjunción con las bolsas retráctiles al vacío BN utilizadas por Chelny, los tres BL120 permiten ahorrar hasta 18 000 dólares anuales. Entre los beneficios adicionales cabe destacar que, en la actualidad, la producción corre a cargo de solo 4-5 operarios en lugar de los 12 necesarios con anterioridad, mientras que la capacidad máxima por hora casi se ha quintuplicado, pasando de 500 a 2880 kg.

Ramil Mukhametshin habló sobre los beneficios de utilizar el Cryovac BL120: “La nueva línea de producción nos ha permitido aumentar la productividad al reducir drásticamente el tiempo anteriormente dedicado a tareas que exigían una importante dedicación de mano de obra. La calidad del producto final ha mejorado, al igual que su atractivo comercial. La ampliación de la vida útil en almacenamiento hasta 10 días nos ha abierto nuevos mercados”.

Asimismo, los equipos garantizan importantes ventajas en términos de sostenibilidad, como es la reducción de producto desperdiciado y de materiales utilizados. El BL120 es el primer cargador que utiliza una bolsa de menor ancho (30 mm menos) que los sistemas de carga manual, lo que proporciona una excelente relación bolsa / producto. Además, el sistema de automatización del BL120 contribuye a la limpieza y salubridad del entorno para los empleados mediante prácticas higiénicas mejoradas y evitando la rotura manual de corvejones, una tarea dura y repetitiva.

Chelny Broiler es pionera en el mercado ruso de productos avícolas, y la experiencia positiva con el BL120 ha demostrado que el sistema ofrece todas las ventajas anunciadas. La empresa no va a conformarse con los resultados obtenidos y ya está marcándose nuevas metas, gracias al apoyo de las soluciones de Sealed Air.