Mammoet permite reformar una importante planta de fertilizantes en la mitad de tiempo de lo planeado originalmente
Cuando la empresa se planteó modernizar estas instalaciones y reemplazar las torres originales por equivalentes más limpias y eficientes, tenía claro que debía reducir al mínimo el tiempo de inactividad. Para complicar aún más el asunto, las torres originales no habían sido diseñadas para poder ser levantadas en una sola pieza, por lo que el enfoque convencional de desmantelamiento pieza por pieza llevaría, de hacerse, varios meses.

Fluor, el consultor del proyecto, acudió a Mammoet en busca de una solución audaz: levantar las viejas torres en una sola pieza. Con una planificación cuidadosa, un sofisticado modelado por computadora, las máquinas adecuadas y un equipo de expertos, Mammoet pudo desarrollar una ingeniosa solución para levantar las viejas torres y después colocar las nuevas estructuras modulares en su lugar.
Para convencer a MWSPC y Fluor de que se podía realizar el trabajo de esta forma, Mammoet preparó un estudio de ingeniería detallado. Los modelos digitales en 3D de cada torre se complementaron con una serie de pruebas ultrasónicas para revelar la verdadera estructura y resistencia. Una simulación de elementos finitos mostró cómo responderían a la presión de ser sacadas de la planta. Y se diseñó una serie de marcos y eslingas a medida para sostener las torres de forma segura durante todo el movimiento.
Un requisito clave era contar con las máquinas adecuadas y Mammoet tenía los modelos para este trabajo, en forma de dos grúas sobre orugas (la CC8800-1, de 1.600 t de capacidad, y la CC6800 de 1.250 t de capacidad), y la grúa de anillo MSG-80, de 3.200 t. Con esta combinación, fue posible llegar mucho más allá de los estrechos confines de la instalación, extraer las torres, moverlas a un área de preparación e izar los reemplazos en su posición.
Abdullah Terkaoui, gerente de proyectos de Mammoet, explica: “Nuestra metodología permitió a nuestros clientes reducir el cronograma de cierre planificado para cada tren de 120 días a 45 días. Luego, a medida que avanzaba la operación, se lograron más ahorros de tiempo: la parada completa del primer tren se completó en 30 días; la segunda parada, donde los levantamientos tardaron solo siete días, llevó 22 días; y, para el tercero, el levantamiento supuso solo tres días, con una finalización del trabajo en 19 días”.
“Esto significó que, gracias a todo el equipo del proyecto y a todos los involucrados, los tres cierres se completaron dos meses (64 días) antes del cronograma original, lo que representa un ahorro de tiempo de más del 50%", añade.

Parte del equipo que ha trabajado en este proyecto.
Nayef Rowily, director de proyectos de MWSPC, declara que se hizo un esfuerzo considerable para revisar repetidamente el plan de Mammoet, teniendo en cuenta la naturaleza del trabajo, que implicaba la integración en un terreno baldío y el deseo de MWSPC de mantener la producción: "Esto se logró a través de un excelente trabajo en equipo, incluida la evaluación de todos los riesgos asociados. Estamos satisfechos con el trabajo de Mammoet en los tres reemplazos. Superaron nuestras expectativas y el equipo hizo un trabajo excepcional al entregar el proyecto en un tiempo récord. El equipo de MWSPC se enorgullece de este importante logro y recomienda la experiencia de Mammoet a escala mundial”.