Dr. Johannes Heidenhain GmbH - Encóders rotativos (transductores de rotación, ángulo)
Heidenhain Encóders absolutos
Encóders absolutos: para servomotores y aplicaciones estándar
Con nuevos y económicos Encóders inductivos, Heidenhain amplía su gama de productos aplicaciones con bajos requerimientos de precisión, que hasta la fecha sólo eran satisfechos con resolvers. Los nuevos encoders inductivos cumplen, con su principio de captación inductivo y su altamente valorado interfaz EnDat, precisamente todos estos requerimientos, ofreciendo además notables ventajas con respecto a la precisión de posicionamientos, estabilidad de la velocidad y dinámica de la regulación.
Junto a la versión monovuelta de 17 bit=131.072 pasos de medida de revolución (ECI 1317), se dispone también del EQI 1329 como versión multivuelta con 4096 (12 bit) revoluciones diferenciables. La longitud constructiva del multivuelta es de tan sólo 39 mm.
Los encoders son mecánicamente compatibles con la variante óptica, el altamente valorado EQN 1325. La carcasa final del motor y el interfaz eléctrico permanecen idénticos independientemente del encoder elegido, con lo que el fabricante del motor alcanza un elevado grado de piezas idénticas, aumentando con ello el tamaño de los lotes de producción y reduciéndose consecuentemente los costes de producción. Lo mismo es de aplicación a las electrónicas subsiguientes y a los cables de conexión.
Junto a la versión monovuelta de 17 bit=131.072 pasos de medida de revolución (ECI 1317), se dispone también del EQI 1329 como versión multivuelta con 4096 (12 bit) revoluciones diferenciables. La longitud constructiva del multivuelta es de tan sólo 39 mm.
Los encoders son mecánicamente compatibles con la variante óptica, el altamente valorado EQN 1325. La carcasa final del motor y el interfaz eléctrico permanecen idénticos independientemente del encoder elegido, con lo que el fabricante del motor alcanza un elevado grado de piezas idénticas, aumentando con ello el tamaño de los lotes de producción y reduciéndose consecuentemente los costes de producción. Lo mismo es de aplicación a las electrónicas subsiguientes y a los cables de conexión.
