Itene impulsa la economía circular en Europa con un nuevo proyecto sobre residuos orgánicos
El Instituto Tecnológico del Embalaje, Transporte y Logística (Itene) ahondará en su estrategia de impulso a la transición hacia una economía circular en Europa con un nuevo proyecto denominado Scalibur, en el que se promoverá la recuperación de residuos orgánicos y su transformación en bioproductos de alto valor añadido, que se suma a la iniciativa Plasticircle, con objetivos similares en el ámbito de los residuos plásticos.
El proyecto Scalibur, cuya propuesta fue aprobada por la Comisión Europea el pasado 8 de junio y deberá ser suscrito formalmente en los próximos meses antes de su puesta en marcha, será ejecutado entre 2018 y 2022 y recibirá financiación a través de Horizonte 2020, el actual programa marco de investigación e innovación de la Unión Europea.
Acrónimo de Scalable technologies for bio-urban waste recovery (Tecnologías escalables para la recuperación de residuos biourbanos), Scalibur busca reducir la brecha entre la viabilidad tecnológica y las aplicaciones industriales en el campo de la valorización de residuos orgánicos urbanos reforzando la cooperación estratégica entre distintos sectores. De esta manera, contribuirá a dos desafíos europeos: reducir los depósitos en vertederos y lograr una economía circular en 2030.
El proyecto está liderado por Itene con la participación de otros 20 socios de nueve países europeos: Alemania, Bélgica, Grecia, España, Irlanda, Italia, Países Bajos, República Checa y Suecia. Además de Itene, entre las contrapartes españolas se encuentran el Ayuntamiento de Madrid, la Fundación Cener-Ciemat y las empresas Fomento de Construcciones y Contratas y Aeris Tecnologías Ambientales.
Esta iniciativa tomará como modelo la localidad de Lund, en Suecia, para transferir su experiencia en la recolección de residuos orgánicos a tres ciudades: Madrid (España), Albano Latino (Italia) y Kozani (Grecia). Durante la implementación del proyecto se realizará un estudio sobre la calidad, logística y esquemas de gestión de la fracción orgánica de los residuos sólidos municipales y del fango de aguas residuales urbanas para incorporar sistemas y tecnologías innovadoras y obtener productos de alto valor basados en materias bio, como bioplásticos, biofertilizantes, biopesticidas y proteínas para alimentos y piensos.
Por una parte, los residuos sólidos del canal horeca (hoteles, restaurantes y cafeterías) se transformarán -a través de la cría de insectos- en proteínas, lípidos y quitina. Por otro lado, los desechos depositados en los contenedores de recogida selectiva de materia orgánica y las partes orgánicas presentes en las aguas residuales permitirán generar biopesticidas y bioplásticos a través de un proceso de hidrólisis enzimática de alto contenido sólido –es decir, la descomposición de sustancias orgánicas por acción del agua con intervención de unas enzimas llamadas hidrolasas - seguida por una fase de fermentación.
Además, el biogás resultante tanto de los residuos sólidos como de las aguas residuales será transformado mediante un tratamiento bioelectroquímico para obtener productos químicos básicos y bioplásticos como el PHBV.
Scalibur complementa así los objetivos propuestos en el marco de Plasticircle (2017-2021), otro proyecto financiado por el programa Horizonte 2020 y liderado por Itene en el que un total de 21 socios se han propuesto estudiar las diferentes fases para transformar residuos en productos valiosos: desde el diseño de los contenedores inteligentes para la recogida selectiva de residuos plásticos hasta la mejora de las rutas de transporte y las tecnologías de clasificación.
El objetivo principal es lograr la recuperación del plástico en la misma cadena de valor, aplicando un enfoque de economía circular, y sus resultados serán probados en las ciudades de Valencia (España), Utrecht (Países Bajos) y Alba Iulia (Rumanía).
Itene también participa como socio en otros proyectos europeos vinculados a la economía circular, entre los que se encuentran Agrimax, que propone aprovechar los subproductos de la industria agroalimentaria y reutilizarlos mediante diversas aplicaciones en materiales agrícolas, alimentos y envases y embalajes, y Ecobulk, enfocado en el reciclado y reutilización de materiales compuestos empleados en los sectores de la automoción, el mueble y la construcción.