Heidelberg Spain, 60 años de historia
Han pasado 60 años desde que el 22 de enero de 1963 Hans G. Hartmann fundase Maquinaria Artes Gráficas Hartmann. En todo este tiempo, el mercado de la impresión ha evolucionado de forma transversal, rápida y radical, siempre siguiendo las dinámicas y las tendencias del resto de sectores. Hemos transitado desde tiempos de abundancia y el “todo es posible”, a la conciencia de la escasez de los recursos y el “no hay avance para la sociedad, el planeta y la economía sin control, respeto y reflexión constante”. Hoy, Heidelberg Spain, una compañía 100% integrada en el grupo internacional Heidelberg Druckmachinen, A.G., es consciente de las necesidades actuales y, a la vez, heredera de una historia y de una filosofía de trabajo que hemos mantenido, redirigiéndola, rediseñándola y aplicándole nuevos enfoques en función de las exigencias contextuales y de las tendencias de cada momento. Rescatado de una publicación de 1974, se lee: “Hartmann sabe que la satisfacción del cliente es el mejor seguro para su propio futuro”. Han pasado 60 años y la empresa sigue fiel a la misma filosofía.
Hartmann nació gracias a una familia vinculada estrechamente con la industria gráfica. Allá por 1730, el convento de San José, de Barcelona, un centro de Carmelitas Descalzas, escondía tras sus muros la fundición tipográfica más importante de España. El dato parece una anécdota histórica, pero lo que fue un convento, se convirtió después de un incendio en el mercado más carismático de Barcelona, La Boquería, y lo que fue la fundición tipográfica, paso de mano en mano y de local en local hasta que en 1885 fue comprada por Bauersche Giesserei, de Frankfurt. En el año 1898, Georg Hartmann adquirió la empresa alemana, junto con su filial española. En los años 20 del siglo XX, la fundición llegó a su máximo esplendor, enrolando en sus filas a los mejores diseñadores de tipografías e incluyendo en sus catálogos tipos tan carismáticos como la Futura, de Paul Renner. Con Carlos Hartmann ya se iniciaron las relaciones con Heidelberg y en los años 60, los tres hijos de Hartmann decidieron separar las compañías, especializándose en tres líneas de negocio, cada una de ellas dedicada a diferentes áreas del mundo de la imprenta.
Han pasado muchos años desde que Hans H. Hartmann fundase Maquinaria Artes Gráficas Hartmann. Meses antes de iniciar la actividad, Ana Grau fue contratada como secretaria de dirección, cargo que ocupó en Hartmann por más de 50 años. “Hablamos de las condiciones y me dieron 5.000 pesetas para comprar una máquina de escribir y material de oficina. El despacho improvisado fue la terraza de la emblemática terraza del Sandor (café situado en la plaza Francesc Macià). La confianza ha sido un factor básico en nuestra forma de trabajar y nuestros clientes lo han entendido siempre como uno de nuestros principales activos”, relata Grau. Heidelberg Spain sigue trabajando con la misma filosofía, heredada de personas como Grau, que han hecho posible este proyecto.
No importa el nombre, interesa mantener el espíritu
Cumplir años para Heidelberg no es el guion de una cronología; es “la correspondencia temporal entre el reconocimiento, la experiencia y la confianza del mercado”. Desde 1963, la compañía ha crecido rápidamente y ha cambiado varias veces de local, hasta que se establece en la calle de Viladomat, 110, de Barcelona. Finalmente, en los 70 y en un emplazamiento que fue propiedad de Fundición Tipográfica Nacional, empresa comprada por los hermanos Hartmann, se construye el nuevo edificio, obra de Xavier Busquets, arquitecto conocido por haber firmado el colegio de Arquitectos de Barcelona. La sede de Cornellà de Llobregat acogerá las oficinas centrales, talleres y centro de demostraciones. Actualmente, es donde reside la actividad de la delegación en España de Heidelberg Druckmachinen, A.G.
“Cuando intentamos explicar una larga historia en un limitado número de párrafos, nos vemos obligados a obviar datos interesantes, anécdotas curiosas o historias con historia; pero es inevitable, las historias largas requieren grandes sacrificios. Durante estos 60 años, hemos pertenecido a familias, a multinacionales holandesas como Buhrmann Tetterode, o Corporate Express, a empresas americanas como Staples y, finalmente, en 2015, entramos a formar parte de la familia Heidelberg. También podemos decir que la dirección de la compañía ha estado en manos de directivos brillantes como Hans Ph. Bock, Joaquín Solana, Vicente Tur, Javier de Quadras, Jose Luís Gutierrez o Gunnar Vogt”, explican desde la compañía. En 2015, durante la rueda de prensa que se organizó para hacer pública la compra de Hartmann por Heidelberg, Harald Weimer, consejero en aquel momento de Heidelberg, comentó: “Este negocio no son sólo cifras. Son muy importantes las personas y juntos podemos ser más fuertes”.
Hoy, en España, respaldados por Heidelberg, dispone de una plantilla de más de 80 profesionales, de los cuales la mitad dan asistencia desde el servicio técnico de la empresa. El equipo de ventas está apoyadopor un gran número de soluciones de amplio espectro para el mercado gráfico, que va desde el software más avanzado hasta míticas máquinas como la Speedmaster XL 106. “Nuestro personal de oficinas y soporte son los responsables de que el engranaje funcione bien lubricado”, apunta la empresa. Desde Wiesloch, el centro logístico central ofrece 130.000 referencias en recambios originales y consumibles, y el Print Media Center destaca por ser “el centro de demostraciones más grande de la industria gráfica mundial”. Helpdesk, asistencia remota, formación, informes predictivos, Inteligencia Artificial, plataforma de eCommerce, contratos de servicio… La lista es larga pero el espíritu es el mismo: “Escuchar, inspirarnos y ofrecer al mercado soluciones”. Roland Krapp, director general de Heidelberg Spain, hace suyas las reflexiones que podían leerse en aquel catálogo de 1974: “Solo si conseguimos el éxito de nuestros clientes, conseguiremos cumplir nuestra misión. Y a mí me gustaría añadir, gracias por 60 años de confianza”.