El presidente de Cajamar insta al sector agrario a posicionarse mejor en el mercado
El presidente de Cajamar, Eduardo Baamonde, ha declarado que la Región de Murcia está a la vanguardia de la agricultura en España y Europa. “Hay marcas murcianas muy bien posicionadas y empresas de mayor tamaño que la media nacional, y por eso van por delante”, y ha lamentado que en el ránking mundial de grandes empresas no aparezca ninguna española hasta el puesto 87 que ocupa Zara.
“Hay que destinar recursos para posicionar la marca. Las empresas han dedicado dinero a la competitividad, y ahora tienen que ir hacia la innovación y el posicionamiento de marca”, ha recalcado.
Durante su intervención en el almuerzo coloquio de la Tertulia La Luz, en Murcia, en la que ha estado arropado por dirigentes de organizaciones agrarias y asociaciones empresariales del sector agroindustrial, junto al consejero murciano de Presidencia, Turismo y Deportes, Marcos Ortuño, el presidente de la primera cooperativa de crédito española ha subrayado que el hándicap de la despoblación es un “tema que preocupa y ocupa“ a su entidad, y debe ser afrontado por España con inversiones en infraestructuras físicas y digitales.
Asimismo, Baamonde ha defendido el papel de las infraestructuras digitales para fijar población en el medio rural, y se ha mostrado convencido de que sin redes de telecomunicaciones e internet de alta velocidad se agravará el problema de la España “vacía” a pesar de la calidad de vida que ofrecen estas poblaciones.
En su opinión, los fondos Next Generation de la UE para afrontar la pandemia del coronavirus son ”un tren que no podemos dejar pasar“ porque los 140.000 millones de euros que recibirá el país, la mitad de ellos a fondo perdido, significan una oportunidad para ”reconocer la importancia del medio rural“ y su contribución a la creación de empleo y la riqueza de España.
Preguntado por la distribución de esos fondos comunitarios, el presidente de Cajamar ha expresado su temor de que muchas partidas queden sin ejecutarse por la idiosincrasia de la gestión administrativa y el riesgo de que se produzcan ”microsolicitudes”, de ahí que abogue por la tramitación conjunta de estos expedientes a través de las asociaciones profesionales.
Eduardo Baamonde ha reivindicado la contribución del sector agrario a la economía española y su fortaleza en el contexto de la UE, como ha quedado demostrado en la crisis del COVID-19 al garantizar el suministro de alimentos y lograr cifras récord en exportaciones, según sus palabras, si bien ha avisado del problema de posicionamiento de marca, aunque no de competitividad, que tiene la producción nacional.
Tras citar ejemplos de productos líderes en la Unión que provienen de España como el vino, las frutas y verduras o el aceite, el presidente de Cajamar ha dicho que “hay que conseguir que los mercados reconozcan la calidad de la producción española y estén dispuestos a pagar por ello”.
Ha alertado de los problemas de rentabilidad que sufren las agroindustrias españolas por la globalización de los mercados, la inflación, el aumento de los costes de producción y la presión de los grandes compradores para fijar los precios del campo, y ha opinado que frente a estos retos se debe apostar por la internacionalización, la agrupación de pequeñas firmas y la innovación.