Roca Barcelona Gallery acoge ‘Arquitectura: Horizonte(s) x (re)habilitar’
21 de diciembre de 2012
En un contexto en el que se ha mostrado las últimas tendencias de Roca para el espacio de baño en el próximo año, el concepto ‘(re)habilitar’ ha sido el protagonista por antonomasia de un debate que ha suscitado reflexiones de distinta índole gracias a las aportaciones particulares y profesionales de cada uno de los ponentes y asistentes.
El debate se ha iniciado manifestando el amplio abanico de acepciones diversas y complementarias que el término ‘(re)habilitar’ ofrece y que, sin duda, varían según el contexto en el que se aplica. Desde las maneras de afrontar de un modo concreto la construcción de un nuevo patrimonio a partir del ya existente, hasta referido a la formación del propio arquitecto y su relación con la sociedad.
Además, los pilares de la nueva arquitectura transformacional que reivindican desde el consejo fueron la seguridad, la viabilidad, la sostenibilidad y la funcionalidad.
Ferran Segarra, director de la ETSAB UPC, por su parte, defendió la necesidad urgente de la especialidad. “Tenemos un buen sistema de enseñanza. Se ha internacionalizado la profesión pero falta una unificación de los perfiles y de las competencias de los arquitectos en la formación”, explicó.
“Es momento de pensar en qué vale la pena centrar esfuerzos. Saber establecer las prioridades, qué es lo más importante, y en estos tiempos es urgente hacer edificios que ayuden realmente a la sociedad. Por encima de representar, demostrar o de la estética tiene que estar el individuo y sus necesidades”. Esta fue la reflexión de Anatxu Zabalbeascoa, que aportó una visión crítica de la profesión.
La periodista e historiadora, colaboradora del periódico El País opinó que el individuo es el gran olvidado de la arquitectura y eso es como decir que la ortografía es la gran olvidada de la literatura. La vivienda y el individuo no pueden ser la asignatura pendiente de la profesión.
José María Echarte, arquitecto y colaborador y creador del blog independiente ‘n+1 arquitectura’, también dentro del bloque crítico, lanzó una reflexión para los asistentes: “¿Cómo puede ser que en una sociedad donde los individuos tienen una previsibilidad muy alta se haya llegado a una situación que ha convertido el arquitecto español en un becario?”
“Uno de los problemas de la profesión es que se está regalando el talento y, por tanto, hay que recuperar la responsabilidad”, explicó Echarte. Pero quiso abrir una ventana al optimismo y explicó que existen salidas de trabajo para la profesión, pero es necesario deshacerse de aquello que nos atenaza y conseguir la capacidad de adaptación que falta.
Durante el debate, también se destacó la importancia ya no del objeto en sí, sino su historia, su pasado y todo aquello que explica. De esta manera defendía Olga Felip, arquitecta y fundadora de Arquitecturía, josepcamps | olgafelip, la necesidad de pensar en la rehabilitación. Para ella rehabilitar es “el solape temporal entre pasado, presente y futuro”.
Pero uno de las reflexiones que también se presentaron durante el encuentro, y que generó un gran revuelo vino de parte de Maite Borjabad, estudiante de arquitectura, que quiso hacer patente su inquietud por la falta de conexión entre la profesión y los perfiles que necesita la sociedad. “Es necesaria una cohesión entre todos los actores: la formación, la profesión y la sociedad”, explicó.