L’Albufera de Valencia, en vías de recuperación
25 de enero de 2011
Investigadores del Instituto de Ingeniería del Agua y Medio Ambiente (Iiama) de la Universitat Politècnica de València (UPV) están desarrollando un proyecto para el tratamiento y recuperación de las aguas de l’Albufera de Valencia, el humedal más emblemático de España, según informó esta casa de estudios. El proyecto, que está siendo coordinado por los profesores Miguel Martín Monerris, Carmen Hernández Crespo y Nuria Oliver Rajadel, consiste de un sistema natural que permite aprovechar la capacidad de depuración de los humedales para reducir sólidos suspendidos, materia orgánica y nutrientes presentes en las aguas del lago.
El profesor Martín Monerris contó a Interempresas detalladamente cuáles son los principios biológicos por los que se rige este proyecto que ya lleva más de un año en marcha. El antiguo arrozal de 40 hectáreas de este humedal, situado en el municipio de Valencia, al norte de l’Albufera, fue expropiado por el ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, con objeto de recuperar un espacio para reproducir el ambiente del parque natural. Con este motivo, se construyó un tipo singular de ‘humedal artificial de flujo superficial’, denominado 'Tancat de la Pipa', en el que se han impulsado trabajos de investigación y actividades públicas como la puesta en funcionamiento de este sistema de tratamiento.
El Tancat de la Pipa, un humedal artificial que devuelve a la vida aguas empozadas
Este humedal “permite depurar parte del agua del lago, utilizando plantas macrófitas que eran abundantes en el lago antes de deteriorarse, como la enea o los juncos. De esta manera, se pueden depurar aguas eutrofizadas aprovechando la capacidad regenerativa de los humedales y no la de la propia Albufera”, señala Martín Monerris. “Para esto, debemos limitar el crecimiento del fitoplancton interceptando los rayos solares con estas plantas y generando así, una sombra sobre el agua que permitirá que el plancton sedimente y quede a disposición de los microbios para descomponerse”, prosigue.
Es así, como el grupo de investigadores valencianos espera liberar nitrógeno y fósforo, a la par de cosechar esta biomasa periódicamente facilitando la eliminación de los desechos. Igualmente afirman que el agua que se devuelve al lago posee una elevada transparencia que permite el crecimiento de la vegetación subacuática, como antaño en L’Albufera.
El humedal artificial opera como un sistema de tratamiento de aguas cuyas entradas son las propias del lago de l'Albufera. Cuenta con siete compartimentos con superficies comprendidas entre 0,36 y 2,75 hectáreas, sumando un total de 10 hectáreas, aproximadamente. El mismo, ubicado en el 'Tancat de La Pipa' posee un alto valor paisajístico y fomenta la biodiversidad de estos ecosistemas actualmente en vías de deterioro y debido a la presión del hombre sobre ellos. “Es un área de nidificación para las aves, preparada incluso para la posible introducción de especies amenazadas, de investigación en temas medioambientales y de educación ambiental”, recuerda el profesor de la UPV.
Este ecosistema natural recreado en el 'Tancat de La Pipa' ofrece la posibilidad de conocer cómo era esta importante laguna antes de que empezara su degradación. “Es un enclave de alto valor ecológico que permite el establecimiento de una importante diversidad de fauna y flora gracias a los ambientes que presenta. Además, a las comunidades aledañas tales como El Saler, Sueca, Cullera o El Perellonet les aporta agua de buena calidad y permite que se desarrollen de nuevo las especies sensibles a la contaminación por estos poblados”.
Una experiencia eutrófica poco común
Si bien este uso de humedales artificiales para tratar aguas urbanas está cada vez más extendido por el mundo, hay que acotar que es “menos común, y de hecho hay muy pocos casos en el mundo, del empleo de sistemas para depurar aguas naturales eutrofizadas”, explica Miguel Martín Monerris. “Un caso similar a este lo encontramos en el Lago Apopka en Florida, en Estados Unidos, un lago hipereutrófico en que una de las medidas recogidas en su plan de restauración es la implantación de un humedal artificial para eliminar nutrientes y sólidos suspendidos”, comparó. Aparte de este lago norteamericano, existen experiencias positivas en el lago de Linfeng Li, en China.
En aras de un humedal saludable en óptimas condiciones
Para el equipo de Martín Monerris, Hernández Crespo y Oliver Rajadel los resultados obtenidos durante el primer año de operación fueron muy positivos, considerando que se trataba del año en el que se ejecutó la puesta en marcha y el crecimiento de las plantas, tratando así un total de 1,85 hm3 de agua. Asimismo informan que la cantidad de nutrientes eliminados en este primer año de ejercicio supone un 5% de los existentes en el lago, mientras que las muestras obtenidas se aproximan a las que serían deseables para recuperar el estado de ‘eutrofización’ en el que se encuentra este humedal valenciano.
Entre las próximas actuaciones que se tienen planteadas para el rescate y la optimización de este paraje natural, ‘Aguas de las Cuencas Mediterráneas’ (Acuamed) está llevando a cabo actualmente la implantación de un sistema de humedal artificial de flujo subsuperficial que reducirá la carga de fósforo que sale con el agua tratada en la localidad costera de Pinedo (Valencia) y renaturalizarla, para posteriormente verterla a l’Albufera. “Nuestro equipo científico se encargará de controlar el funcionamiento de este sistema”, sentenció Martín Monerris.
También se ha de destacar que en el ámbito del Parque Natural, existen otros dos sistemas de humedales artificiales, promovidos por Acuamed, cuyo objetivo también es la mejora de la calidad de las aguas que entran al lago. Por el momento, si bien queda mucho por hacer para poder volver a ver a l’Albufera como nuestros abuelos la vieron, ya al menos se pueden respirar por sus alrededores vientos de cambio que traerán cientos de peces, aves y plantas acuáticas de vuelta a su verdadero 'nido valencià'.