¿Por qué Europa necesita una agricultura más productiva?

Seguridad alimentaria, eficiencia de los recursos, estabilidad económica, mejora de la biodiversidad y mitigación del los efectos del cambio climático, son algunos de los significativos beneficios que la agricultura productiva ofrece a la sociedad europea según un reciente estudio publicado por el Humboldt Forum for Food and Agriculture.

El informe, ‘El valor social, económico y ambiental de la productividad agrícola en la Unión Europea’, evalúa los efectos de la agricultura productiva en la UE, entendiendo por tal, aquella basada en el uso de modernas tecnologías, como maquinaria agrícola, nuevas variedades de semillas, fertilizantes y productos fitosanitarios.

Según los resultados obtenidos, cada punto porcentual de aumento de la productividad agrícola en la UE produce los siguientes beneficios:

• Proporciona alimento a más de 10 millones de personas por año
• Aumenta los ingresos netos de los agricultores europeos en aproximadamente 500 millones de Euros anuales
• Reduce las importaciones de ‘tierras virtuales’ (alimentos que consumimos pero no producimos) alrededor de 1,2 millones de hectáreas
• Ahorra 220 millones de toneladas de emisiones en CO₂
• Conserva el equivalente global de la biodiversidad para la fauna y la flora de hasta 600.000 hectáreas de selva tropical

“Este estudio, el primero con base científica llevado a cabo en la materia, cuantifica los diversos beneficios generados por la agricultura productiva en la UE”, afirma el Dr. Steffen Noleppa de Agripol GbR y uno de los autores del estudio. Por su parte, Harald von Witzke de la Universidad Humboldt de Berlín y presidente del Foro Humboldt para la Agricultura y la Alimentación, comenta: “Es evidente que, en lo que respecta a la agricultura, la productividad importa, y mucho”.

En palabras de Carlos Palomar, Director General de la Aepla, “el estudio nos recuerda a todos que incorporar los avances tecnológicos que la ciencia nos garantiza una mayor productividad de nuestra agricultura, y con ello, mejora nuestra calidad de vida”. “En este sentido, tenemos la esperanza de que este estudio sirva para entender mejor la importancia de los logros alcanzados por la investigación e innovación en nuestro sector. Sin embargo, para continuar esta tarea y ofrecer a los agricultores soluciones que faciliten su competitividad, es necesario contar con políticas y regulaciones que fomenten la innovación y permitan afrontar los retos de futuro para seguir ofreciendo alimentos saludables y de calidad, a precios asequibles para todos los ciudadanos”, concluye Palomar.