APAG Extremadura ASAJA denuncia que los créditos bancarios prometidos al sector agroganadero son un auténtico engaño

Según la organización agraria, los préstamos firmados por las administraciones regional y nacional con los bancos no están llegando a los afectados por la sequía. Todo comenzó el pasado 22 de mayo, cuando el consejero de Agricultura del gobierno de Extremadura, José Antonio Echávarri, anunció ‘a bombo y platillo’, según la asociación agraria, el acuerdo al que había llegado con nueve entidades financieras. Esto se traducía en una partida de un millón de euros para hacer frente a los préstamos concedidos, a los agricultores y ganaderos, durante el periodo 2008-2010, que vencían este año, a las cuales no se podía hacer frente debido a las pérdidas millonarias producidas por la sequía del sector agroganadero de este año.

Ese acuerdo firmado entre las partes se concretó en un decreto, bastante tardío, que se publicó el 21 de junio. A la vez, el gobierno nacional también plasmó una serie de medidas financieras para mitigar los efectos de la sequía en un decreto publicado el pasado 26 de mayo, donde se establecía la posibilidad de solicitar nuevos préstamos ganaderos avalados por la Sociedad Estatal de Caución Agraria (SAECA).

Sin embargo, y según critican desde Apag Extremadura Asaja, este organismo público no está avalando los préstamos solicitados por los afectados, bloqueando la única solución a corto plazo acordada para no dejar caer definitivamente al sector: “Al menos hubiera servido para inyectar algo de oxígeno a un enfermo que está en la UVI pero sin estos préstamos lo que se está haciendo es desconectarlo literalmente de la máquina”, denuncia el presidente de Apag Extremadura Asaja, Manuel Laparra.

Por ello, desde Apag Extremadura Asaja denuncian que, tras consultar con agricultores y ganaderos extremeños, estas ayudas, que en principio iban a beneficiar a 5.300 afectados, se han quedado en puro humo porque los bancos no están concediendo ningún tipo de crédito, a pesar de haberse comprometido a ello con las administraciones.

Aunque esta refinanciación a corto plazo era un parche, al menos hubiera servido, en opinión de Manuel Laparra, para aliviar en parte el estado actual de drama personal que padecen los afectados. Por si fuera poco, a todo ello, hay que sumar el brutal incremento de los costes de producción y el reciente anuncio de la subida del IVA, que conducen al sector agroganadero directamente al abismo, según Laparra.

Foto: COAG.