1.300 expositores de 41 países estuvieron presentes en la cita bienal francesa

¿Quién ha dicho que la agricultura y la juventud son dos conceptos antagónicos? El Parc des Expositions de París-Nord Villepinte rebosó durante sus cinco días de celebración de gente joven interesada por todo lo relacionado con el campo y todo lo que lo envuelve. Los pasillos del recinto de la capital gala acogieron del 20 al 24 de febrero a más 200.000 asistentes que cruzaron sus puertas para conocer la innovación que ofrece la agricultura, un sector que no para de evolucionar.

“No ganaremos ninguna batalla en la agricultura si no hay innovaciones, innovaciones al servicio del medio ambiente”. Con esta frase inauguró SIMA 2011 el ministro de agricultura de Francia, Bruno Le Maire. Y es que más del 40% de las innovaciones presentadas eran estrenos mundiales, muchos de ellos premiados con algunos de los 33 galardones de los SIMA Innovation Awards, valorizando un avance hacia una agricultura eficiente y sostenible.

A pesar de la difícil situación económica a nivel global, el sector agrícola quiere seguir demostrando que está al pie del cañón. Los expositores se volvieron a movilizar a pesar del clima de tensión generalizado. Fueron 1.300, procedentes de 41 países, representando más de 1.550 marcas. El 50% de las empresas presentes eran empresas extranjeras, unas cifras que demuestran la dimensión internacional de esta feria. A ello se debe añadir que de todos los inscritos, 285 eran nuevos en esta edición 2011.

Stands como el de John Deere vieron pasar por sus pasillos a miles de visitantes durante los cinco días de feria.

Los visitantes afluyeron de forma importante desde el mundo entero. A lo largo de los cinco días de duración se registraron 209.800 entradas, 1 de cada 4 procedentes del extranjero, lo que significa un ligero aumento en comparación a 2009, en el que hubo 208.550 entradas registradas. “Los dos últimos años han sido muy difíciles para los proveedores de equipos del mundo agrícola”, –explica Martine Dégremont, directora de la feria–, “y pienso que el éxito de SIMA 2011 confirma la recuperación económica. Hasta algunos expositores han contado haber realizado ventas importantes desde el primer día”.

Los intercambios fueron de nuevo particularmente numerosos con más de 50 talleres, conferencias y visitas a explotaciones. El congreso AgriEvolution Paris 2011 disfrutó también de la afluencia de la feria. Las mesas redondas permitieron analizar la situación en varios países (India, Polonia, China, Ucrania, Rumanía, Estados Unidos, etc.) y la oportunidad para intercambiar y conocerse.

Una veintena de empresas españolas estuvieron presentes en SIMA 2011, la mayoría de ellas bajo el paraguas de Agragex –Agrupación Española de Fabricantes-Exportadores de Maquinaria Agrícola y sus Componentes, Sistemas de Riego, Equipamiento Ganadero y de Post-cosecha–. Durante nuestra presencia en el certamen pudimos conversar con algunos de ellos, como por ejemplo Serrat Trituradoras, que llevó hasta la capital francesa una selección de sus trituradoras forestales, sobre todo “aquellas específicas que sabemos que pueden tener salida en el mercado francés y en el norte de Europa. Llevamos exponiendo aquí unas ocho ediciones y se trata de un mercado duro pero que debemos atender”, comentaba Joaquín Serrat, director comercial de Serrat Trituradoras.

En la misma línea se expresó Josep Ramón Pons, gerente de Arcusin, que acudió a SIMA en “su afán de incrementar su presencia en el mercado internacional”. Allí la empresa ilerdense exhibió sus remolques autocargadores AutoStack FS, los agrupadores de pacas pequeñas Multipack B-14 y los vibradores para frutos secos y aceitunas Autopick en sus modelos MT y GT.

Tampoco faltaron empresas tan importantes como el Grupo Tatoma, que llevó hasta SIMA su amplia gama de remolques y picadores de paja, o Tenías, que continuó en París la demostración internacional de sus palas cargadoras.

Serrat Trituradoras y Arcusin no faltaron a la cita en la capital francesa.